Los que me seguís por las redes sabéis que gran parte del verano lo paso en la sierra de Madrid, por eso quería compartir con vosotros hoy un lugar especial al que nos encanta ir de Picnic.
A las afueras de Guadarrama, cuando comienza el ascenso hacia el puerto de los leones, encuentras un rinconcito escondido que desde hace unos años ha vuelto a cobrar vida: el parque del Gurugú.
Hasta que lo acondicionaron subíamos al embalse de la Jarosa a por piñas y a comer allí, pero desde hace uno par de años es nuestro rincón especial para ir de picnic por ser más desconocido y estar menos masificado que la Jarosa Además está muy cerquita del pueblo y puedes ir en coche, andando o en bici.
Como anécdota os contaré que justo cuando me quedé embarazada del nano, en el estudio de arquitectura en el que estaba trabajando nos presentamos a un concurso de lo más interesante: el objeto del concurso era el diseño del nuevo Centro de Interpretación de la Naturaleza de Guadarrama y el acondicionamiento del entorno del Gurugú.
Por aquél entonces la zona se conocía como “Los Picutos” y pasábamos por ahí cuando hacíamos rutas en bici. Como supondréis no ganamos el concurso, pero el proyecto que lo hizo era muy chulo y se llevó a cabo, así que hace un par de años ese espacio medio virgen a la salida del pueblo se transformó en un espacio de ocio al aire libre.
El diseño de la zona fue muy acertado. En la zona del acceso hay un parque infantil con una tirolina, columpios, un campo de fútbol y un arenero.
Un poco más arriba tenemos una zona con mesas de picnic, de la que nosotros solemos dar buen uso para comer e incluso para que los peques se cuenten sus historias.
Si asciendes un poco más te encuentras con el acceso al CIN Sierra de Guadarrama, compuesto por una zona de exposición que habla de la Flora y la Fauna del Parque, un restaurante en el que se come fenomenal y otra zona de juegos con pista americana y tirolina.
El Gurugú es el lugar perfecto si quieres mezclar naturaleza, deporte y cultura. Además está vallado y no es excesivamente grande, lo suficiente para que tengan libertad para correr pero sin perderlos de vista. ¡Y está cerquita de Madrid!
Así que ya sabéis, si pensáis en picnic, pensad en el Gurugú… eso sí, no se lo contéis a mucha gente que luego nos quedamos sin sitio 😛
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