Desde que el nano es legoadicto cada vez somos más en casa: nosotros y todos sus LEGO. Ha llegado a acumular tantas piezas que le dijimos que ahora que tenía tantas cosas montadas podríamos preparar una exposición en su propia habitación con sus creaciones, tanto las que vienen con instrucciones como las inventadas y enseñárselas a todos los que vengan a vernos. De esta manera él sabe lo que ha montado, dónde tiene puesta cada pieza y lo que le apetece montar ahora.
Por supuesto él va transformando su exposición en la medida en que monta y desmonta a su antojo, nosotros no somos los padres de la peli de LEGO y le dejamos ser creativo ¡faltaba poco!