Hoy quiero empezar la semana con una crónica nuestra experiencia el sábado en Glück, para que luego no me digáis que os propongo planes y luego soy yo la que no voy 😉
¿Os acordáis que os contaba el viernes que tenían preparado un concierto para los más peques de la casa? Pues por fin pudimos acercarnos y la experiencia no pudo ser mejor!!!
Cuando llegamos a la tienda, todavía quedaban 15 minutos para el concierto y ya había cola en la calle para entrar. Nosotros, que eramos 3 familias, con sus correspondientes carros, tuvimos que dejarlos junto con la mitad de cada unidad familiar, “aparcados” en la calle y entramos a ubicar a nuestros peques, porque la tienda es bastante estrecha en su acceso (que es donde tienen lugar los conciertos) y tuvo tanto éxito la convocatoria, que se llenó en un momento. Así que la mayoría de los padres dejamos a nuestros hijos dentro y disfrutamos del concierto desde la puera…. ¡era su momento, no el nuestro!
Tuve la suerte de colocar al mío delante de una “mayor” a la que le dije,”vigílamelo por favor, que se esté sentado” y ella, con gran sentido de la responsabilidad, consiguió que el nano se estuviera sentado, aunque tuvo que insistirle un par de veces, porque en cuanto vio movimiento de gente y la guitarra ya quería tocarla…
Como veis estaba hasta arriba, alguno que yo me sé se quiso sentar en el mismo escenario!!!
Cuando ya estaban ubicados (más o menos) el grupo empezó su actuación… En primer lugar se presentaron todos, ya que era una actuación “combinada”, explicando quién era quién y de donde venían.
Había preparado un genial mapa en la pared de pizarra y como si de un profe de geografía se tratara, el vocalista de The Starlets, ubicó en el mapa el lugar de procedencia de cada uno de ellos dentro de Escocia.
Tras las presentaciones, comenzó el concierto, y en ese momento empezamos todos a disfrutar (pequeños y mayores), mi peque decidió que sentado estaba mejor, y se quedó totalmente embobado… y el guaje decidió que prefería centrarse en la percusión más que en la parte acústica… fue genial porque le dieron a los niños instrumentos y pudieron participar en el concierto.
El concierto duró una media hora, que para ellos es más que suficiente para que se queden sentaditos y no la líen…. aunque luego no había quien los levantara! El mío de quedó ahí sentado como diciendo, “y el bis para cuando?” Se levantaron todos y solo cuando un músico le dio un pandereta, conseguimos levantarlo…..
¡¡¡Estaba tan a gusto!!!
SInceramente, la experiencia fue genial, por la iniciativa, por la música, por lo que disfrutaron los peques, porque me sirvió para conocer a nuevos amigos como paparracho, mamanatas, su guaje y el resto de la familia, a Cruz y a Olivia (aunque nos hiciera una vista express, a la próxima más rato eh?) y para reencontrarme con antiguos amigos, como Juan y Clara, descubri la compañia de teatro de Jose…. la verdad es que siempre es una alegría y más para una alicantina “perdida” en Madrid… me faltó conocer a la culpable de todo esto, María, pero la vi muy liada y no quise molestar… así tengo la obligación de volver y de paso hacer unas compritas!
¡Gracias a Glück por organizar este concierto!