Que el nano es un loco de los Lego ya os lo conté hace un tiempo, pero es que desde entonces la cosa ha ido a más… se levanta por la mañana pensando en lo que va a construir ese día ¡incluso si le da tiempo te dibuja unas “instrucciones” con el paso a paso de cómo hacerlo! (a quién habrá salido ejem ejem).
Que esté tan lleno de creatividad me encanta, pero todo tienes sus “contra” y es que cada vez tenemos más piezas de Lego en casa y el cómo clasificarlas y organizarlas nos traía por el camino de la amargura.